Un aprendizaje significativo se debe motivar en necesidades reales. Por lo tanto, los contenidos se establecen en función de un reelevamiento de las demandas de cada puesto de trabajo y las tareas que se llevan a cabo son las que en realidad se necesitan hacer.

En relación al punto anterior, la enseñanza debe ser personalizada, atendiendo a las aptitudes y tiempos propios de cada persona.

Debido a que entendemos a la informática como una herramienta útil para una enorme diversidad de tareas, nuestras metodologías de enseñanza son primordialmente prácticas.

Todas las actividades están orientadas a formar usuarios inteligentes, es decir, usuarios que puedan enfrentar nuevas situaciones y resolverlas por medio de las herramientas informáticas adecuadas en forma autónoma y eficiente.